Conocer la salud financiera de tu empresa es importante porque te ayudará a tomar decisiones informadas para conducir a tu organización por el camino correcto respecto a la asignación de recursos, crecimiento, rentabilidad e incluso hacia nuevas oportunidades de negocio.

Cuando un emprendimiento ve la luz, uno de los primeros aspectos a cuidar son las finanzas. Es común que las startups comiencen a tener más gastos que ingresos; sin embargo, hay que mantener un control de cuánto dinero debería estar ingresando al negocio al primer, segundo o tercer mes para ver resultados de la inversión, esforzarse para que el negocio sea rentable y que el presupuesto esté inteligentemente invertido con más inventario, abrir otro punto de venta, diversificar el negocio, etcétera. 

Adam Smith, uno de los economistas más famosos de la historia dijo una vez: “El único presupuesto bueno es el presupuesto equilibrado”; es decir, es importante que los ingresos sean por lo menos iguales a los gastos que está generando la empresa para evitar pérdidas. 

¿Y de qué manera un negocio sabe que está ganando y no perdiendo capital? Bien, aquí entran en juego las buenas prácticas para conducir hacia una salud financiera, pero también hay que adicionar el uso de herramientas digitales que ayuden a facilitar el trabajo. 

Buenas prácticas para la salud financiera

Tener buenas prácticas administrativas para tener un negocio saludable evitará que tu emprendimiento tome malas decisiones financieras. 

• Utiliza tus estados financieros. Los estados financieros proporcionan información sobre los ingresos, gastos, rentabilidad, capacidad de pago y otras obligaciones financieras a corto y largo plazo. Para las startups que aún no tienen mucho conocimiento en finanzas, existen en el mercado softwares empresariales que arrojan estos informes con base en la información recabada del negocio, así los pequeños propietarios tienen a la mano dicha información para tomar mejores decisiones. 
  
• Realiza un análisis de deuda a corto y largo plazo. Es importante conocer el nivel de endeudamiento de la empresa para corregir errores en el presupuesto. 
• Evalúa tus inversiones para determinar si son rentables o no. Puedes conocer la rentabilidad con el informe financiero llamado “Estado de resultados”, te indicará cuánto pierde y gana tu negocio. 
• Establece objetivos para realizar mejoras. Tener objetivos claros te ayudará a establecer un punto de partida de  dónde está tu negocio y hacia dónde quieres llegar. Durante el camino es importante conocer el avance del trabajo para hacer reajustes en caso de ser necesario y alcanzar  tu meta 
• Analiza las medidas preventivas y correctivas que ayudarán a tu startup a ahorrar dinero a largo plazo; por ejemplo, si durante el mes de octubre las ventas caen y el inventario se queda retenido por la baja de demanda, la acción preventiva sería evitar la inversión de mayor inventario y la acción correctiva sería utilizar las estrategias de oferta y promoción. 

Recuerda que es importante utilizar herramientas tecnológicas como son los softwares empresariales para obtener un análisis financiero del negocio que permita tomar mejores decisiones, al mismo tiempo que aseguras un mejor control de costos y ganancias.