Por más exitosa y bien administrada que sea tu empresa, una crisis es casi inevitable en algún punto del camino, ya que en ocasiones no depende de factores que estén en tus manos, sino del entorno y los ciclos que intervendrán en ella. Es importante que te prepares para una crisis y tener en cuenta algunas maneras para sobreponerte si se diera el caso, y así aminorar los daños. ¿Qué te parece si enlistamos 10 consejos que te pueden ser de utilidad en un futuro?

1. Reduce tus gastos. Durante una crisis hay cosas de las que se puede prescindir. Aprovecha la situación para ser más consciente de los pequeños gastos que se generan durante la operación. Quizás ya no contratar el servicio de catering para las reuniones, o la renta del salón de eventos para la presentación del informe anual, sino ofrecer algo que no involucre la contratación de más externos y hacerlo tú mismo. para las reuniones, o la renta del salón de eventos para la presentación del informe anual, sino ofrecer algo que no involucre la contratación de más externos y hacerlo tú mismo. para las reuniones, o la renta del salón de eventos para la presentación del informe anual, sino ofrecer algo que no involucre la contratación de más externos y hacerlo tú mismo.
2. Optimiza tus tácticas. Es momento de evaluar qué tan efectiva está siendo tu estrategia de mercado y, en vez de recortar de tajo su presupuesto, a lo mejor puedes redireccionar los medios. Enfócate en las fortalezas de tu marca y usa los canales más efectivos para que no se desperdicien los recursos.

1. Reduce tu stock. Si tu empresa normalmente tiene cierta cantidad de producto en stock, en momento de crisis se aconseja que lo reduzcas. De esta manera gastarás menos en almacenamiento y distribución, y habrá menos pérdida en caso de que el producto se vuelva obsoleto.
2. Acorta los plazos de cobro. Una crisis definitivamente no es el momento para ser más flexible con los cobros. Asegúrate de que tus engranes financieros estén mejor aceitados que nunca. Muchas veces las crisis de las empresas se deben a una mala administración en los cobros, ya sea porque tardan mucho en hacerlo o hay un manejo de créditos que dificulta la solvencia.
3. Planifica una estrategia de crisis. Sabemos que no puedes adelantarte a todo lo que pueda pasar, pero aprovecha los momentos de bonanza en la empresa para definir qué hacer en caso de una crisis de negocio. No es lo más placentero pensar en un panorama adverso, pero cuando las condiciones te pongan inevitablemente en este lugar, tendrás una guía para tomar decisiones rápidas que te permitan adaptarte al cambio.
4. Reduce los gastos en servicios básicos. Así como se van a disminuir los gastos en aquello que no necesitas contratar, el uso de los servicios básicos deberá ser más racional. Cambia a focos ahorradores, no prendas aire acondicionado si no es necesario, configura los equipos para que tengan modo de ahorro de energía… Vas a ver que estas pequeñas acciones te ayudarán a enfocar tus recursos en aspectos más primordiales.   
5. Replantea los acuerdos con tus proveedores. Es momento de pedir ayuda a quienes han estado contigo en el trayecto de tu marca. Si tienes buena relación con un proveedor, plantéale la situación por la que atraviesa tu negocio y busca la manera de que te ayude a salir adelante. A lo mejor pueden hacer un plan conjunto para, una vez superada la crisis, él reciba a cambio un beneficio con tus productos o servicio.

1. Aprovecha los medios gratuitos para promoción. Cuando hay crisis, hay que trabajar para resolverla, pero también es importante que no descuides que tu marca sigue ahí y que necesita seguir con las estrategias de promoción. Para tus ofertas, haz uso de los medios gratuitos como las redes sociales.
2. Busca alianzas. Durante la crisis es muy probable que no seas el único en esa situación. Si bien éste no es el momento para tomar decisiones a la ligera y aventurarte, puedes aprovechar la coyuntura para aventurarte a hacer alianzas que no harías en otro momento. A lo mejor con otra empresa se pueden compartir gastos o generar una relación que implique un alivio económico para que poco a poco salgan juntos de la crisis.